lunes, 29 de enero de 2024

LA MUERTE DE LA VERDAD

 

Si preguntas a cualquier persona por la calle, ¿Qué opinión tienes de lo que hicieron los nazis con los judíos? Te responderán, con casi total seguridad, que fue una barbaridad, un genocidio, un crimen… sin embargo si preguntaras ¿qué opinión tienes de lo que está haciendo Israel a los palestinos? Es muy probable que entre las respuestas que obtengas encuentres, “tienen derecho a defenderse”, “los palestinos tampoco son unos santos”…

Todo genocidio está envuelto en un relato que lo justifica. Los nazis justificaron el holocausto, para defenderse de la corrupción de su “raza” (hoy puede parecer una tontería, pero en esa época la eugenesia era una ciencia al alza), también justificaron el traslado de los judíos a guetos, como un lugar idílico donde los judíos podían vivir en comunidad y practicando sus tradiciones. Este relato fue aceptado por el mundo, hay que recordar que Hitler asciende al poder en 1933 y la 2ª Guerra Mundial comienza en 1939.

Del mismo modo, el Estado de Israel (que no hay que confundirlo con el pueblo judío) está elaborando un relato, que gracias a medios de comunicación afines, está trasladando al exterior, donde se presentan como víctimas, al mismo tiempo bombardean a población civil mientras recogen ayuda humanitaria, ejecuta a civiles desarmados (mujeres y niños incluidos) a través de francotiradores, arrasa campos de refugiados…

La tecnología actual ha democratizado la información, y cada vez son más los medios que están denunciando el genocidio que Israel está cometiendo con el pueblo palestino, pero ¿Qué hacen las potencias internacionales?

Durante la II Guerra Mundial, las democracias occidentales fueron reticentes a acoger a los judíos que Alemania estaba exterminando, la última investigación ha sacado a la luz la documentación del padre de Anna Frank (cuyo diario se haría tristemente famoso años después de la guerra) que demuestran sus esfuerzos por conseguir el visado hacia Gran Bretaña o Estados Unidos, recibiendo la negativa a obtener el visado en varias ocasiones.


En la actualidad, las mismas democracias occidentales han retirado la financiación a la UNRWA (Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina y Oriente Medio) tras la acusación de que varios trabajadores de esta agencia participaron y colaboraron con Hamas en el ataque terrorista del 7 de octubre. Al parecer la justificación de “casos aislados” solo es válida cuando se trata de justificar la corrupción en los partidos políticos. Mientras tanto la organización dependiente de las Naciones Unidas que trabaja para paliar los desastres de la guerra en los civiles, ve mermada su financiación y por lo tanto los recursos con los que trabajar.

Existe un relato para justificar todas las acciones, unos medios para difundir esos relatos y finalmente personas dispuestas a asumir ese relato como cierto. Como diría el filósofo francés M. Foucault “es en el discurso donde reside el poder, porque es en el discurso lo que determina lo que es o no verdad”, si Nietzsche mató a Dios en el siglo XIX, fueron los filósofos posmodernos, como Foucault, los que mataron a la “verdad” en el siglo XX. Cada día se hace más necesario “resucitarla”.

“El mundo no será destruido por aquellos que hacen el mal, sino por aquellos que lo observan y no hacen nada” Albert Einstein.

jueves, 25 de enero de 2024

REGALOS

 

En una sociedad como la nuestra donde prima la imagen, la apariencia física se ha convertido en uno de los factores más importantes a la hora de relacionarnos. Las redes sociales se han encargado de potenciar esa idea, donde a la predominancia de la imagen, a las que se le añaden filtros para “mejorarla”, destacando colores, figuras, enfoque, etc., distorsionando la realidad para transmitir una imagen distinta a la original, eliminando o paliando las imperfecciones.


Existen miles de tratamientos para disimular las imperfecciones que la edad nos va dejando en el rostro, las intervenciones estéticas se han multiplicado, etc.

Nuestra relación con el mundo se ha convertido en una farsa, mostrándonos como esperan que nos mostremos y no como realmente somos.


Cuando recibimos un regalo, éste, suele venir envuelto en un bonito papel, brillante, con colores llamativos, dibujos artísticos, etc., pero al instante nos deshacemos del envoltorio para descubrir su interior, a la sorpresa inicial se une una emoción al ver lo que hay dentro, e independientemente del uso que se le dé al regalo, tras pasar un tiempo relativo con él, empieza a formar parte de nuestras pertenencias como una más, ya no es nuevo, ya lo hemos utilizado, ha dejado de sorprendernos, forma parte de nuestras pertenencias como una más. Sin embargo, cuando volvamos a tomarlo, no recordaremos el papel que lo envolvía, posiblemente habremos olvidado las emociones que sentimos al descubrir lo que era, y vagamente recordaremos las primeras veces que lo usamos, sin embargo, puede, que abra en nosotros una emoción cada vez que lo veamos o lo utilicemos, quizás nos agrade por lo que es, por lo que nos hace sentir, o puede que recurramos a ese objeto cuando tengamos alguna necesidad concreta, lo superficial habrá desaparecido al poco tiempo para quedar la esencia.


Con las personas pasa exactamente igual, todas y cada una de las personas que nos cruzamos son regalos que nos vamos encontrando, y al igual que los regalos el “papel” que los envuelve desaparece al poco tiempo, dejando al descubierto tal y como son, su capacidad de sorprendernos es cada vez más inusual, pero con el tiempo queda su esencia. Muchas pasarán, al igual que con las cosas que acumulamos en nuestra casa, al cajón del olvido, otras recurriremos a ellas por cómo nos hace sentir, o para satisfacer una necesidad concreta.

En el mundo de la imagen, la esencia sigue siendo lo más importante, porque el tiempo se encargará de tirar el “papel de regalo” a la basura, y se descubra a cada cual tal y como es.

Ten a esas personas cerca de ti, aunque estén lejos, yo procuro hacerlo con cada uno de esos “regalos” que la vida me pone por delante.

“Me avergoncé de mí mismo cuando me di cuenta que la vida era una fiesta de disfraces: ¡Y yo acudí con mi rostro real!” Franz Kafka

miércoles, 17 de enero de 2024

AGITACIÓN PERMANENTE

 La estrategia trotskista del Partido Popular.

Tras la toma del poder por los bolcheviques en la Revolución Rusa, superada la guerra civil que le siguió y habiendo muerto Lenin, el nuevo poder revolucionario constituido se debatió entre dos corrientes ideológicas, una propuestas por Stalin, denominada “el socialismo en un solo país” y otra propuesta por Trotsky, “la revolución permanente”.

La primera proponía establecer un Estado socialista próspero que sirviera como imagen al resto de países capitalistas y que estimulara a las clases obreras revolucionarias a seguir el ejemplo del pueblo ruso.

La segunda proponía expandir la revolución al resto de países manteniendo y exaltando el ardor revolucionario de las clases trabajadoras hasta el estallido de la revolución, generar un estado continuo de exaltación pre-revolucionaria.

Cien años después de todo aquello, el Partido Popular se ha decantado por seguir la estrategia promulgada por Trotsky y ha puesto en marcha una estrategia de “revolución permanente” (permítanme la analogía) donde todos los dirigentes populares vuelcan sus fuerzas en confrontar directamente con el gobierno central y hacer de todas las cuestiones, una cuestión de Estado.

Es habitual ver y oír a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid y a José Luís Martínez Almeida, alcalde madrileño, confrontar directamente con Presidente del Gobierno o con los Ministros y Ministras que consideren oportuno, a esta estrategia se ha sumado también Juanma Moreno Bonilla, presidente de la Junta de Andalucía, Fernando López Miras, presidente de la Comunidad de Murcia y la recién elegida presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, más preocupados en confrontar con el Gobierno que con sus opositores parlamentarios. Sabiendo que sus declaraciones se verán recogidas en la prensa nacional, buscan la agitación permanente de sus bases con la idea de que la movilización de sus votantes, simpatizantes e indecisos, arrastren a Alberto Nuñez Feijoo a la Moncloa


.Esta estrategia puede ser efectiva en el caso de que la legislatura sea corta (algo bastante probable), si la legislatura se alarga en el tiempo, mantener este estado de tensión se hace bastante insostenible.

¡Quién me iba a decir a mí, que llegaría el día de ver al Partido Popular como un partido trotskista!

Es de ilusos pensar que la derecha no estudia a los teóricos marxistas, puede que lo estudien con más ahínco que aquellos que se proclaman de izquierdas.

“Definiremos retórica como la facultad de teorizar lo que es oportuno en cada momento para persuadir” Aristóteles

miércoles, 10 de enero de 2024

CUESTIÓN DE ÉTICA

             Aristóteles fue el primero en utilizar la palabra “ética”, la definía, aproximadamente, como la mejor forma de proceder por los seres humanos desde un punto vista racional. En la actualidad donde el objetivo de muchas empresas es obtener beneficios a toda costa, la “ética” se ve como un molesto obstáculo para maximizar los beneficios.

Aunque podemos extender esta tendencia a la mayoría de los sectores económicos, me centraré en el sector de la información, donde el concepto de ética a duras penas sobrevive en honrosas excepciones. La necesidad de informar, y que la información sea veraz, objetiva, etc., se ve empañada por la necesidad de generar titulares que atraigan al lector, con el único objetivo de generar impactos y visualizaciones que multipliquen las visitas.

La prensa se ha convertido en un mecanismo de generar opiniones, abandonando su idea primigenia, como era informar para que el lector se construya su propia opinión. Todos los medios de comunicación han multiplicado el número de artículos de opinión a costa del número de noticias, del mismo modo el tratamiento de las noticias está impregnado de un “tufillo” tendencioso, con el que se persigue que el lector se postule en un sentido concreto. Con la aparición de Internet, de los diarios, digitales y la generalización de las redes sociales, la aparición de comentarios a dichas noticias, dan la oportunidad de sentenciar, desde la más alta atalaya que proporciona la ignorancia, a veces difundiendo mensajes racistas, bulos, o insultos. Bien es cierto que todos los medios de comunicación delegan la responsabilidad de estos comentarios en aquellas personas que los hacen, y del mismo modo la responsabilidad de lo escrito en los artículos de opinión son de los articulistas, eximiendo a los medios de comunicación de toda responsabilidad. A pesar de esto ¿tienen los medios alguna responsabilidad en esta situación?

Es evidente que yo soy responsable de lo escrito en estas líneas, pero también es cierto que los medios que reproduzcan este artículo tienen su parte de responsabilidad también, ya que aportan un público donde expandir las ideas que aquí se exponen.

Del mismo modo, los comentarios vertidos a través de las redes sociales o directamente en las páginas de algunos periódicos son responsabilidad de aquellos que lo escriben, estos periódicos tienen la capacidad de ofrecerles un público al que dirigirse, y la pregunta que deberían hacerse los responsables de estos periódicos es ¿Qué aporta este comentario respecto a esta noticia? ¿es cierto lo que apunta este comentario? ¿matiza algún aspecto de la noticia?. Sin embargo, la impresión que me da es que las preguntas que se hacen son las siguientes ¿Cuántos impactos va a generar este comentario? ¿Cuántas personas se verán en la necesidad de responder a este comentario? y ¿Cuánto dinero me va a generar este comentario?

¡Si Aristóteles levantara la cabeza!

“La legitimación de la opinión vertida va de la mano del bagaje intelectual y cultural de quién emite esta opinión” David Pastor Vico