Translate

jueves, 27 de marzo de 2025

EL NUDO GORDIANO

 La inestabilidad global hace incompleto el análisis de una cuestión concreta

El mundo se ha convertido en un lugar inestable donde es difícil poner el foco en un único asunto para hacer un análisis. En un mundo global, donde la decisión de un país, una empresa, una persona determinada… tiene consecuencias en diferentes partes del mundo y de diferentes formas, centrar la atención en una de las cuestiones de actualidad deja flecos sin atar en otras muchas cuestiones.

Si centramos la atención en uno de los aspectos de la actualidad nacional, es difícil decidirse por qué tema tratar: la situación política provocada por la Dana en Valencia, ha provocado un maremoto político, donde las cuentas públicas han sido puestas en manos de la extrema derecha, lo mismo que ha pasado en Murcia. El gobierno sigue sin presentar Presupuestos Generales del Estado, mientras avanza en aumentar el gasto en defensa, sin especificar de dónde sacará el dinero sin tocar otras partidas económicas. La Federación Española de Fútbol, deja fuera como sede del Mundial 2030 al estadio de Balaidos (Vigo) para meter a Anoeta (San Sebastián) dejando un pufo a corrupción sin dar explicaciones por ello, se sigue desmontando la Sanidad Pública y cada vez es más difícil que te den una cita médica en un tiempo razonable. Otro año más se cierran plazas en la Educación Pública mientras se mantienen los conciertos con la Educación Privada. La crisis de los migrantes en Canarias a la que ninguna institución parece importarle, etc.

Si, por el contrario, prestamos nuestra atención al panorama internacional la situación no es más alentadora: a las dos guerras a las que se está poniendo el foco de atención mediático, Ucrania y Gaza, han generado una disensión entre los socios históricos como EEUU y Unión Europea. EEUU y Rusia, se reparten Ucrania mientras Europa intenta entrar a formar parte del juego, siendo ignorada por las potencias principales, mientras que en todas estas negociaciones Ucrania no le dan el papel de “actor principal”. En Gaza, Israel sigue perpetrando un Genocidio, con el visto bueno de la “Comunidad Internacional” buscando apoderarse de todo el territorio palestino para que las constructoras del presidente norteamericano monten allí un resort de lujo para ricos. Europa prepara a sus ciudadanos para un posible conflicto y recomienda tener preparada una mochila para sobrevivir durante 72 horas en caso de conflicto bélico o desastre natural, mientras exige a sus Estados miembros que aumenten el gasto en defensa, para dejar de depender de la OTAN y EEUU militarmente. Donald Trump habla sin ningún tapujo de anexionarse Canadá y Groenlandia y envía a la mujer del vicepresidente de gira por Groenlandia en un acto de provocación. EEUU deporta a cárceles sin juicio previo a miles de inmigrantes, a los que después se les pierde la pista, sin que nadie pregunte por su salud. Las bolsas fluctúan generando una enorme inestabilidad financiera. Donald Trump firma con su rotulador aranceles a los productos de todo el mundo generando una guerra comercial…


Y mientras todas estas situaciones son provocadas por las decisiones de unos pocos, ¿qué hace la población? ¿por qué no se manifiesta para que se tenga en cuenta sus necesidades? La población, abrumada, sigue a lo suyo, esperando que todo lo que he comentado anteriormente le afecte lo menos posible.

“La gente reinterpreta las cosas para encajarlas en una estructura básica de valores morales que, de hecho, todos compartimos” Noam Chomsky

miércoles, 19 de marzo de 2025

PALABRAS QUE INCLINAN LA BALANZA

 El uso de determinadas palabras condicionan nuestra percepción de los hechos.

Las palabras definen y limitan el mundo que conocemos, así que, cuanto más rico sea nuestro vocabulario, más amplia será la concepción del mundo que nos rodea. Cada una de las palabras que conocemos están dotadas de matices que perfilan su significado y genera ideas y pensamientos concretos perfilados por los detalles que separan una palabra de otra con un significado similar.

Es por todo esto que debemos estar atentos al uso del lenguaje ya que a través de él se transmiten, ideas, valores, y nos predisponen hacia un posicionamiento ideológico concreto.

Durante la tregua de la guerra en Gaza, hemos visto como Hamás liberaba a una serie de personas de las que había “secuestrado” a cambio de que Israel liberara a otro número determinado de personas que había “detenido”. Este hecho me ha llamado la atención, ya que si el verbo secuestrar está definido por la RAE como “Retener indebidamente a una persona para exigir dinero por su rescate, o por otros fines”, el verbo detener se define en su tercera acepción como “privar de libertad (a alguien) la autoridad competente, encarcelándolo”[1].

En ambos casos, se trata de privar de libertad a alguien y en ambas definiciones se hace hincapié en la legitimidad para llevar a cabo una u otra acción, y en ese matiz es donde se busca inclinar la balanza de las simpatías hacia uno u otro bando, ya que, si bien el secuestrador no tiene legitimidad para hacerlo, quien detiene, si la tiene, al ser una autoridad competente. Pero vayamos a los hechos concretos.

En un informe publicado por Amnistía Internacional el pasado 18 de julio de 2024[2] (antes del comienzo de la guerra en Gaza) se pone de manifiesto como Israel detiene masivamente y arbitrariamente a población palestina sin causa judicial pendiente. Si nos atenemos a las definiciones ¿Dónde queda la legitimidad para llevar a cabo estas acciones? 

Entiendo que si las personas retenidas por Hamás son, indiscutiblemente, un acto de secuestro, del mismo modo y por los mismos motivos, las personas retenidas por Israel son víctimas de secuestro por parte del Estado israelí.

Usar un término u otro para definir una acción similar, no es otra cosa que un intento de legitimar una acción y deslegitimar otra, con el objetivo de dirigir la balanza hacia uno u otro bando.

“Los límites de mi lenguaje son los límites de mi mundo” Ludwig Wittgenstein

sábado, 15 de marzo de 2025

¿QUIÉN CUIDA AL QUE CUIDA?

 Reflexión sobre el asesinato de Belén Cortés, educadora en centro de protección de menores.

El pasado día 9 de marzo fue asesinada Belén Cortés, educadora en un “centro de menores” de la provincia de Badajoz. Esta noticia ha tenido una amplia repercusión por lo dramático del asunto y el tratamiento que los medios han hecho del tema vuelve a bascular entre el desconocimiento y el morbo. Una situación que se repite recurrentemente, cada vez que se trata una noticia relativa a los “centros de menores” y todo lo relacionado con ellos.

En primer lugar, me gustaría aclarar que la terminología “centro de menores” es una terminología muy amplia que recoge el gran abanico que engloba a las distintas tipologías de centros enmarcados dentro de los dispositivos de protección y reforma, encargados de dar cobertura a unos perfiles de menores de edad tan variados como tipos de centros existentes.

Por no profundizar en este tema, del que me ofrezco a explicárselo a todas aquellas personas que tengan interés en conocer los distintos tipos de centros existentes, me centraré en el Centro en el que trabajaba la compañera asesinada.

Por lo que se puede deducir de las informaciones que han publicado los distintos medios de comunicación, el centro se trataba de un Centro de Tratamiento Terapéutico con programa de Modificación de Conducta. Este centro está destinado a dar servicio a distintos menores que presentan conductas disruptivas, con el objetivo de dotarlos de herramientas que le permitan un proceso de socialización normativo en el entorno en el que vivan.

Generalmente son menores que no tienen habilidades sociales para resolver conflictos a través del diálogo, y utilizan la violencia (verbal o física) como recurso habitual, lo que les ha acarreado diferentes problemas a lo largo de su vida. Para ingresar en este tipo de centros es necesaria una derivación por parte del juzgado de menores o el sistema de protección de menores, que consideran que un recurso de medio-abierto puede ayudar a la reinserción social de estos menores.


La mayoría de estos centros (y los demás también) están en manos de ONG´s o empresas de índole “social”, que se presentan a las licitaciones que ofrece la administración pública.

La administración pública (la Junta de Comunidad correspondiente, que es quien tiene las competencias en este sentido) presenta un pliego de condiciones que deben cumplir estas organizaciones para hacerse cargo del recurso a cambio de un precio.

En el pliego de condiciones que presenta la licitación, viene definido, entre otras cosas: número de menores a los que se les da servicio, plantilla mínima de trabajadores necesarios para cubrir el recurso, especialidades de cada trabajador principalmente: director/a, psicólogo/a, trabajador/a social, educadores/as sociales, integradores/as sociales así como el importe que la organización cobrará por prestar el servicio y de cuya cuantía dependen todos los gastos que genere el recurso, entre los que hay que contar: alquiler del edificio, gastos de luz, agua, alimentación, personal, ropa, material, etc.

Llegado a este punto, y habiendo explicado el contexto residencial donde se produce el asesinato de la compañera cabe hacerse una pregunta que los medios de comunicación no han tratado en profundidad o han obviado directamente, si el recurso está destinado a menores con problemas de conducta, que, generalmente, tienen respuestas violentas ¿por qué estaba una educadora sola en el centro? ¿Qué responsabilidad tiene la organización para la que trabajaba en la organización de los turnos de trabajo? ¿Qué responsabilidad tiene la Junta de Extremadura a la hora de establecer el número de trabajadores para cubrir el servicio? ¿Quién asumirá responsabilidades respecto a esto?

Es más que probable que, si Belén hubiera estado acompañada por otro compañero/a, su muerte podría haberse evitado.

Los principales responsables del asesinato de Belén son los menores que lo han cometido, pero esta situación no hace más que poner en evidencia la importancia que tiene para la administración y empresas la seguridad de las personas que trabajamos en estos recursos ¿Quién se hace responsable de nuestra seguridad?

Las personas que trabajamos en las distintas tipologías de “centros de menores” sabemos a qué nos enfrentamos cada vez que vamos a trabajar, la tipología de menores que están a nuestro cargo y sus características personales y sociales y son muchas las ocasiones en las que nos encontramos solos haciendo nuestro turno de trabajo, con una media de 16 menores por centro, con unas edades que oscilan, en la mayoría de las veces, entre los 14 los casi 18 años, en toda la plenitud física que corresponde a esas edades.

El asesinato de Belén debe de generar un punto de inflexión donde los responsables de tomar las decisiones en relación a los “centros de menores” sean conscientes de cuál es la realidad que vivimos muchos de los trabajadores de este tipo de recursos, donde, generalmente, no pasa nada, hasta que pasa.

“No es en la resignación en la que nos afirmamos sino en la rebeldía frente a las injusticias” Paulo Freire

martes, 11 de marzo de 2025

ENTRE UN MUNDO QUE MUERE Y OTRO QUE NACE

 El papel de Europa en  el tablero geopolítico actual.

Algunos analistas e historiadores, comienzan a hablar de que estamos viviendo un cambio de Era, mientras el capitalismo global da muestras de agotamiento, nacionalismos exacerbados intentan ocupar un espacio del que habían estado excluidos hasta ahora.

Por primera vez, en muchos siglos, Europa no juega un papel crucial en la construcción del mundo que está construyéndose mientras el anterior se desmorona. La Europa de las últimas décadas ha vaciado de contenido todo su continente, ha “externalizado” todo aquello que la hizo estar en la cúspide de la geopolítica durante tanto tiempo.

En las últimas décadas, Europa se ha dedicado a desmantelar el Estado del Bienestar que se creó tras la II Guerra Mundial y la desaparición de los últimos imperios. Ha puesto en manos de terceros países: la investigación científica,  la industria ha sido trasladada al extranjero en busca de una mayor rentabilidad económica, desindustrializando a los países europeos, la alimentación se importa para abaratar gastos, a costa de los derechos laborales de trabajadores de otros países, la defensa militar se puso en manos de la OTAN dirigida por Estados Unidos donde Europa tiene una papel servil a los intereses estadounidenses, las fronteras son defendidas por países fronterizos a cambio de un suculento precio…

Llegado este momento, donde el mapa geopolítico se tambalea, con nuevos actores dispuestos a hacer cambiar los contrapesos existentes hasta ahora, la amenaza de una guerra a gran escala es cada vez más posible ¿qué puede ofrecer Europa? no cambiará su posición aumentando su arsenal militar.

La situación europea es similar a la de un deportista que lleva años sin entrenar y se encuentra con el partido decisivo de su carrera. A la hora de jugar, lo más probable es que termine lesionado, y con total seguridad perderá el partido, aunque se compre el mejor equipamiento para jugar el partido.

Europa debe volver a invertir, no en armas, sino en investigación científica, industrialización, principios democráticos, soberanía alimentaria… recobrar los valores de la Ilustración que le hicieron posicionarse como eje del mundo moderno, y esperar la oportunidad para volver a tener algo que decir en el panorama internacional.

“El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos” Antonio Gramsci

lunes, 3 de marzo de 2025

EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR

Europa, al igual que el protagonista del cuento de Hans Christian Andersen, se paseaba por el tablero geopolítico sin nada que lo cubriera.

Muchos habrán oído de niños el cuento de Hans Christian Andersen titulado “El traje nuevo del emperador”. En él se relata la historia de un emperador que era aficionado a estrenar los trajes más increíbles, con las telas más espectaculares.

Un día, un par de estafadores se hicieron pasar por sastres, con la idea de dar a tan presumido monarca gato por liebre, le mostraron, lo que le hicieron creer que era, la tela más fascinante de todas las telas del mundo, pero que tenía una particularidad, solo podía ser admirada por aquellas personas inteligentes, ya que los tontos y las personas de pocas luces, no podían disfrutar de tan mágica tela, el emperador después de “admirar” el tejido, lo mando mostrar a todas las personas de palacio, que por miedo a quedar como tontos, admiraron y alabaron la tela y gusto del emperador por dicho material.

Así que el emperador convencido por la reacción de las personas que tenía a su alrededor, mandó confeccionar un traje a medida para estrenarlo en un gran desfile. Tras convenir una cuantiosa suma de dinero para su elaboración, los estafadores hicieron ver que confeccionaban un traje maravilloso para el emperador que una vez terminado y cobrada la cantidad desaparecieron.

El emperador mandó organizar un desfile para mostrar su nuevo traje que solo podrían disfrutar aquellas personas que tuvieran un mínimo de inteligencia, y así creía ir vestido, comenzó a pasearse por las calles cercanas a palacio. Todas las personas se miraban extrañadas, pero nadie se atrevía a decir que el emperador estaba desnudo, por no quedar como personas simples y de poco seso, hasta que un niño que andaba por la calle, lleno de inocencia gritó “El emperador está desnudo”, poco a poco toda la multitud empezó a reírse del emperador, quien en ese momento se dio cuenta de su desnudez y corrió a palacio para vestirse.

Hoy Europa es el “emperador desnudo” que creía vestir las mejores galas construidas a base de su historia, pero ha tenido que llegar un “niño” descarado como Donald Trump, para dejar en evidencia que el traje que vestía el viejo continente no era más que un sueño de grandeza que se disipó tiempo atrás. El papel de la Unión Europea en el tablero internacional ha quedado en la irrelevancia como muestran los movimientos y negociaciones que se están dando en el tablero geopolítico.

Haría bien, la Unión Europea en “volver a palacio” a buscar ropas que ponerse e intentar recuperar la influencia internacional que tiempo atrás tuvo.

La Unión Europea debe agradecer a Trump que lo haya despertado de su sueño colonizador para darse cuenta que es un territorio colonizado. ¿Estará a tiempo de cambiar su estatus actual? El tiempo y sus acciones nos lo dirán.

“Los Estados no son agentes morales, son instrumentos de poder que operan en interés de las estructuras particulares de poder interno de su sociedad” Noam Chomsky