Tras la oleada
de asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas, un término está
imponiéndose en distintos foros y debates sobre la violencia de género, este
término es “terrorismo patriarcal” o “terrorismo machista”. La aparición de
esta nueva concepción del “terrorismo” ha suscitado diferentes enfrentamientos
dialécticos entre los que aceptan este nuevo significado y los que no.
Si nos
atenemos a nuestra propia experiencia nacional, hablar de terrorismo es
rememorar los atentados de ETA, vinculados a la reivindicación independentista
de Euskalherria, con sus más de 800 muertos, algo más reciente es el terrorismo
fundamentalista, teniendo este otros objetivos mucho más abstractos, pero si en
algo coinciden los dos es en llevar a cabo acciones que, provocando el terror
en la población, facilite la obtención de sus objetivos.
FOTO ICÓNICA DE ATENTADO DE ETA EN LA CASA CUARTEL DE VICH |
La aparición
de Al-Qaeda rompió el molde de las estructuras terroristas clásicas, hasta
entonces, todos los grupos terroristas habían contado con una estructura
piramidal, sin embargo Al-Qaeda (la red) no disponía de esta estructura y
cualquiera podía atentar en nombre de la organización sin tener vínculo directo
con los ideólogos o dirigentes de la “organización”, desde ese momento todo era
Al-Qaeda. Por lo tanto, no podemos basar la definición de “terrorista” en la
pertenencia a una organización, pero sí en la consecución de unos objetivos
mediante el “terror”.
TERRORISTAS DE AL QAEDA |
Cuando un
hombre, por medio de ejercer el “terror”, obliga a su pareja para que se
comporte de determinada manera, cuando se usan las amenazas, los golpes, la
intimidación, y a pesar de todo su pareja no se pliega a sus demandas, cuando
amenaza con asesinarla, con hacerle daño a sus hijos, y a pesar de todo, la
mujer no cede, cuando finalmente asesina a su pareja, este hombre podríamos
decir que es un terrorista, y como las demandas son definidas dentro de una
estructura patriarcal o machista, pienso que está fundamentado el calificativo
de “terrorismo patriarcal o machista”. Ya que si bien el hombre no comparte una
organización con otros hombres, si comparte principios ideológicos y al igual
que los “lobos solitarios” de Al-Qaeda, pretenden imponer sus principios
generando el terror en su víctima.
44 MUJERES ASESINADAS POR VIOLENCIA DE GÉNERO EN LO QUE LLEVAMOS DE AÑO |
Por más que
los sectores reaccionarios del país no quieran aceptar esta realidad, los
asesinatos de las mujeres a manos de hombres, son fruto de un proceso de
opresión de la mujer del que comenzamos a salir, la resistencia de muchos
hombres a perder una cuota de poder que tenían en relación a las mujeres es lo
que está provocando el aumento de este tipo de crímenes. Esconder o relativizar
el problema no hace más que agrandarlo y posponer el final de esta situación.
La bochornosa conversación entre el Alcalde de Madrid y el Secretario General
de Vox, no hacen más que añadir justificaciones para que se siga asesinando.
Lejos de ser parte de la solución, tanto Almeida como Ortega Smith, son parte
del problema.
Cada vez que
una mujer es asesinada, el miedo en el resto de la población crece y este es el
objetivo del terrorismo.
“Todo sistema de dominación se basa en la presunción de normalidad”
Michel Rolph Truillot.